Dostó, dostó...

La Sra. que llega al ginecólogo y le dice:
- Oiga doctor, me gustaría que le hechara un vistazo a una peca que me ha salido en la ingle.
A lo que el doctor le contesta:
-Bueno, descúbrase y póngase cómoda en la camilla.
Al observar la peca, le receta una crema y la cita para la semana siguiente...

Ese día, el doctor le vuelve a pedir a la Sra. que se descubra y que nuevamente se acomode en la camilla...preguntando:
- ¿Se ha puesto vd. todos los días la crema, tal y como le receté?
A lo que la Sra. responde:
- Si, si, claro!
Entonces, el doctor coje un algodón con un poco de alcohol y frota la peca... posteriormente, observa que la peca ha desaparecido y que el algodón ha quedado manchado, decidiéndose a mirarlo más de cerca...Tras unos segundos, exclama:
-Oiga Sra., ¿su marido es carpintero?
a lo que la Sra. sorprendidísima, contesta:
- S..S..siii !!!... pe...pe...pero Vd. ¿como sabe eso?...
A lo que el ginecólogo responde:
- Bueno, PUES DÍGALE A SU MARIDO, que se quite el lápiz de la oreja, cada vez que le vaya a comer el coño.

Amo allá

es que algunos no saben dejar el trabajo cuando llegan a casa....

jaja, muy bueno... la pobre mujer que apuro, su marido hacinedo sexo en el taller con ella, con la ropa de trabjo puesta, me los imagino... jajaja

Doctor, doctor, que veniamos porque mi mujer tiene tres pechos... Ah! Yquiere que le extirpe uno de ellos, verdad?
No, que me implante a mí otra mano. Esto, entre mis companeros de trabajo en la venta de oro hace muchísima gracia...